RESILIENCIA.

En medio de la adversidad reside la oportunidad (Albert Einstein)

La resiliencia es la capacidad de sobreponerse a las adversidades y adaptarse a los cambios en esta vida.

Necesitamos ser resilientes para sobreponernos a tantas circunstancias que nos agobian y oprimen constantemente, para hacer los cambios que necesitamos en este mundo que cambia constantemente, a una velocidad impresionante de lo contrario quedamos fuera de competencia.

Las adversidades demandan de resiliencia.

Jesús dijo, en el mundo tendréis aflicción, pero confiad yo he vencido al mundo JUAN 16.33

Cierta pareja que perdieron a su hijo primogénito lloraba desconsoladamente, parecía no había más razones porqué vivir, ni fuerzas para hacerlo, sin embargo, en medio del dolor encontraron fortaleza por la fe en Jesús para seguir.

la confianza en Dios nos da fuerzas para seguir.

Necesitamos apoyarnos en algo que sea más grande y fuerte que nosotros cuando vivimos dolores y angustias que son más fuertes y grandes que nosotros.

uno de los personajes en las escrituras, allá en el nuevo testamento que nos mostró más de su vida en el servicio a Dios fue San Pablo, vivió momentos muy difíciles, incomodos como cómodos, en sus palabras decía he aprendido a contentarme cualquiera sea mi situación, terminaba diciendo todo lo puedo en cristo que me fortalece.

San Pablo encontraba en cristo las fuerzas para sobreponerse a cualquier adversidad vivida en su trayectoria de fe.

En Cristo encontraba la resiliencia para seguir.

Apoyarnos en Cristo nos hace más resiliente para vivir.

En la historia de la iglesia hemos visto y leído de los horrores que vivieron los hombres y mujeres de fe, muchos se preguntaban cómo era posible semejante fortaleza no física sino de espíritu, tanto que inspiraron a miles a seguir a Jesús, uno de ellos el famoso Policarpo un hombre que siendo ya un anciano demostró tener una fuerza de espíritu inquebrantable, que conmovió a todo un imperio con su valor frente al dolor que le tocó vivir, fue sentenciado a la hoguera por no negar a su señor Jesús, para él no había otro , y eso no le gusto al emperador quien lo condenó a morir. Muchos fueron inspirados a seguir a Jesús por su vida, aun en los últimos momentos antes de morir.

Las personas resilientes inspiraran a quienes están a su alrededor.

Por ser personas determinadas, que, aunque les tiemblen las piernas no se detienen, no se rinden, son personas que se levantan de los golpes más fuertes, son personas que no se apoyan en ellos mismos, sino en algo mayor que los sostiene, sus sueños, su fe, sus convicciones, su propósito.

Alguien escribió si el barco no viene hacia ti, nada hacia él.

para hacer cambios en nuestras vidas necesitamos ser resilientes, es fácil dejarse llevar por la corriente, pero un resiliente entiende que también requiere empezar cosas nuevas, que a veces se nada contra la corriente, para no conformarse, para no detenerse, para disciplinarse y mantenerse en marcha.

              Lo que estaba destinado a matarnos nos hace más fuertes