AMOR A MIL.
El corazón de una buena madre tiene una pizca de parecido al corazón de Dios, es lo que hemos escuchado decir, en cierta ocasión me tocó ver a una mamá llorar en el féretro de su hijo, ella decía hubiera preferido morir en tu lugar, hijo mío, una madre entregada a sus hijos. les tolera más oportunidades de lo que sus hijos realmente merecen. EXODO 34.6-7 el señor, el señor Dios compasivo y misericordioso, lento para la ira y grande en amor y fidelidad, que mantiene su amor hasta mil generaciones después y que perdona la maldad, la rebelión y el pecado, pero no tendrá por inocente al culpable, sino que castiga la maldad de los padres en los hijos hasta la tercera y cuarta generación. Dios siempre ha expresado su sentir a los hombres una de las cosas más placenteras que podemos escuchar de otros, es cuanto valemos y/o somos valorados a los ojos de alguien más, sobre todo si es alguien especial y muy significativo(a) para nosotros, y aquel que nos creó, con tanta atención y detalles...